EJEMPLO TASACIÓN. CRISTO CON LA CRUZ A CUESTAS
1. FOTOGRAFÍAS
Fig.1. Cristo con la cruz a cuestas.
Seguidor de Luis de Morales.
S. XVI.
Convento de San Pedro de las MM. Justinianas (Cuenca).
2. NÚMERO DE INVENTARIO
N/A.
3. DENOMINACIÓN DEL OBJETO
Cristo con la cruz a cuestas.
4. CLASIFICACIÓN
Seguidor de Luis de Morales. S. XVI.
5. PROCEDENCIA
Convento de San Pedro de las MM. Justinianas (Cuenca).
6. MATERIAL
Soporte (obra pictórica): Madera. Capa pictórica: óleo.
7. TÉCNICA
Óleo sobre tabla.
8. MEDIDAS
93 x 83,5 cm.
9. DESCRIPCIÓN
Se representa a Cristo de medio cuerpo como un hombre de mediana edad, vigoroso, barbado y con el cabello sobre el hombro derecho. Cristo, en escorzo, ladea bruscamente la cabeza a la izquierda, rematada por la corona de espinas, con los ojos entrecerrados, mirando al espectador de soslayo, el cual se embebe de una sensación de compasión producida por el dramatismo en la actitud y expresión de la figura. Porta la pesada cruz, en la que se distinguen las diferentes vetas y nudos de la madera, sobre el hombro izquierdo, con ambas manos, la derecha dispuesta más arriba que la izquierda, sujeta fuertemente la parte izquierda del patibulum, evidenciado en la tensión de las mismas.
Los plegados rígidos de la túnica azulada con reflejos blanquecinos, acentuados por el contraste lumínico de la obra, contrastan con la textura lisa y esmaltada del tejido. Las amplias bocamangas así como la escotadura del cuello dejan entrever la contundente fisionomía del representado. Todo ello sobre un fondo neutro y oscuro que aísla a la figura de todo contexto narrativo.
10. ESTADO DE CONSERVACIÓN
Tabla 1. Esquema del estado de conservación del soporte lígneo.
Tabla 2. Esquema del estado de conservación de la capa pictórica.
En las fichas únicamente se han completado los campos acordes con la información obtenida de visu a través de la fotografía. No obstante a la hora de la elaboración de la misma se han contemplado todos los aspectos que se han de tener en cuenta a la hora de realizar una evaluación sobre el estado de conservación de una obra pictórica sobre un soporte lígneo.
11. FIRMAS / MARCAS
La pieza no presenta firmas/marcas.
12. INSCRIPCIONES
La pieza no presenta inscripciones.
13. EXPOSICIONES
- Callada belleza: arte en las clausuras de Cuenca, Cuenca, 2007-2008.
14. BIBLIOGRAFÍA SOBRE LA PIEZA
VV.AA. Callada belleza: arte en las clausuras de Cuenca, cat. exp., Catedral de Cuenca, 2008, pág. 202.
15. ESTUDIO
Luis de Morales nació hacia 1510-11 y murió en torno a 1586, posiblemente en Alcántara (Cáceres). Se desconoce su lugar de nacimiento pero su producción artística se encuentra vinculada a la provincia de Extremadura, así como a las ciudades portuguesas de Évora y Elvas. Durante más de cincuenta años fue el pintor más importante y prolífico de dicha región, realizando desde retablos hasta cuadros de altar. Se estableció en Badajoz en 1539, tras haber trabajado en Plasencia y alrededores. Cabe destacar, que en la mencionada área geográfica, se entremezclaban influencias provenientes de Flandes y Castilla, apreciables en la pintura de Morales. Artistas como Alonso Berruguete (c.1490-1561) o Sebastiano del Piombo (h. 1485-1547), le sirvieron como inspiración para definir su estilo. Alcanzó la fama prematuramente gracias a la elaboración de pequeñas tablas de temática religiosa, adaptó a la clientela de la época un producto artístico y devocional de factura muy cuidada que enlazaba con las tradiciones flamencas de finales del siglo XV y principios del XVI, matizadas por elementos y modelos italianizantes. Además, el ambiente espiritual de la época se proyectó sutilmente en esas imágenes piadosas. Sencillas en su composición y muy cercanas al creyente, añadían a su gran eficacia visual una indudable carga emocional. Entre estas composiciones se puede destacar la iconografía objeto de estudio, Cristo con la cruz a cuestas, episodio evangélico narrado en los cuatro evangelios canónigos (Mateo 27:31-33[1], Marcos 15:20-22[2], Lucas 23:26-32[3] y Juan 19:16-18[4]).Se representa a Cristo de medio cuerpo con la cruz camino hacia el Calvario, eliminando cualquier otra figura o elemento narrativo, dejando aislada la figura.
Los orígenes de esta tipología no están del todo claros. No obstante, el primer artista, del que se tiene constancia, en desarrollar este modelo, fue Giovanni Bellini (1430-1516) y su círculo (Fig.2), donde destacaron las versiones de Sebastiano del Piombo. Actualmente se tienen documentadas cuatro versiones de Sebastiano, en las que se representa el camino de Cristo hacia el Calvario. En su primera interpretación realiza una versión de carácter más extenso. Las tres restantes corresponden a una versión narrativamente más reducida, coincidente con la obra objeto de estudio. Una de estas versiones fue encargada por el embajador español en Roma, Fernando de Silva, conde de Cifuentes, actualmente en el Hermitage Museum de San Petersburgo (Fig.3), otra por un comitente desconocido (posiblemente español), conservada en el Museo Nacional del Prado (Fig.4) y la última de ellas, según Vasari, para un miembro de la familia Grimani.
[1] “Después de burlarse de él, le quitaron el manto, le pusieron su propia ropa y se lo llevaron para crucificarlo. Al salir encontraron a un hombre de Cirene que se llamaba Simón, y lo obligaron a llevar la cruz. Llegaron a un lugar llamado Gólgota”.
[2] “Después de burlarse de él, le quitaron el manto y le pusieron su propia ropa. Por fin, lo sacaron para crucificarlo. A uno que pasaba por allí de vuelta del campo, un tal Simón de Cirene, padre de Alejandro y de Rufo, lo obligaron a llevar la cruz. Condujeron a Jesús al lugar llamado Gólgota”.
[3] “Cuando se lo llevaban, echaron mano de un tal Simón de Cirene, que volvía del campo, y le cargaron la cruz para que la llevara detrás de Jesús. Lo seguía mucha gente del pueblo, incluso mujeres que se golpeaban el pecho, lamentándose por él. Jesús se volvió hacia ellas y les dijo: —Hijas de Jerusalén, no lloren por mí; lloren más bien por ustedes y por sus hijos. Miren, va a llegar el tiempo en que se dirá: “¡Dichosas las estériles, que nunca dieron a luz ni amamantaron!” Entonces» “dirán a las montañas: ¡Caigan sobre nosotros!’, y a las colinas: ‘¡Cúbrannos!’ 31 Porque, si esto se hace cuando el árbol está verde, ¿qué no sucederá cuando esté seco?»”.
[4] “Así que entonces lo entregó a ellos para que fuese crucificado. Tomaron, pues, a Jesús, y le llevaron.17 Y él, cargando su cruz, salió al lugar llamado de la Calavera, y en hebreo, Gólgota”.
Fig.2. Cristo con la cruz a cuestas.
Círculo de Giovanni Bellini.
1505-1510.
Isabella Stewart Gardner Museum.
Número de inventario: P26n17.
Fig.3. Cristo con la cruz a cuestas.
Sebastiano del Piombo.
1537.
Hermitage Museum (San Petersburgo).
Número de inventario: ГЭ-77.
Fig.4. Cristo con la cruz a cuestas.
Sebastiano del Piombo.
1532 – 1535.
Museo Nacional del Prado.
Número de inventario: P000348.
Es importante destacar la estrecha relación entre la obra de Sebastiano, realizada para el conde de Cifuentes (Fig.3) y la realizada por Luis de Morales para Juan de Ribera, cuando era obispo de Badajoz (1562-68), actualmente conservada en el Real Colegio Seminario de Corpus Christi-Museo del Patriarca de Valencia (Fig.5). Las similitudes son evidentes, ambos representados muestran el ceño y la frente dolorosamente fruncidos, en el caso de Morales más acusado, o una disposición prácticamente idéntica de los dedos de la mano derecha sujetando la cruz. Únicamente la ausencia de la corona o la camisa ligeramente abierta dejando ver el volumen casi escultórico de su cuerpo distinguen ambas versiones, aunque esto sirve al español para intensificar la impresión de dolor, dejando, por ejemplo, que la sangre brote generosamente de las heridas abiertas alrededor de su cabeza. Además de Piombo, Morales pudo depender de la obra del pintor portugués, Manuel Denis (act. 1535- h. 1563), el cual reprodujo con exactitud la iconografía objeto de estudio, en Castilla, en 1544, y que actualmente custodia el Convento de San José de Ávila (Fig.6). Esto no es una afirmación descabellada, pues dicho artista fue contemporáneo a Morales y trabajó en una localización geográfica próxima a la suya. Además, el artista luso incorporó a lado de su firma (Dionisi faciebat), la inscripción “Sebastianus venetus inventor” haciendo referencia a la autoría de la composición. La dependencia de este modelo es aún más evidente. Morales liberó la contención de su modelo en los tonos y colores, así como en el dibujo. Pero sobre todo, dotó al representado de una diferente temporalidad, ubicada en un momento preciso de su sufrimiento, pues las heridas sobre la cabeza de Jesús continúan sangrado aunque la corona no ciñe su frente.
Fig.5. Cristo con la cruz a cuestas.
Luis de Morales.
S. XVI.
Real Colegio Seminario de Corpus Christi-Museo del Patriarca (Valencia).
Fig.6. Cristo con la cruz.
Manuel Denis.
1544.
Convento de San José (Ávila).
Cristo con la cruz a cuestas fue una composición muy explotada por Morales, su taller y sus seguidores. Todas derivan del modelo, anteriormente comentado, de Sebastiano del Piombo. Se conocen muchas de estas obras, la mayoría realizadas por seguidores anónimos, ya sea de la creación piombesca o de la versión moralesca. La historiografía considera que la obras realizadas por la mano de Morales son únicamente la ubicada en el Real Colegio Seminario de Corpus Christi-Museo del Patriarca, la perteneciente a la Colegiata de Osuna (Fig.7), la que se conserva en el Museo Nacional de Arte de Cataluña (Fig.8) y la de la colección del conde de Mayorga. En cuanto a obras de sus seguidores, podemos destacar la obra objeto de estudio, ubicada en Convento de San Pedro de las MM. Justinianas de Cuenca (Fig.9), la perteneciente a la colección Grases de Barcelona (Fig. 10), o la perteneciente al Convento de Dominicas de Plasencia (Fig.11), de estas, alguna ya ha sido atribuida, como por ejemplo, la ubicada en la Real Iglesia de San Miguel y San Julián de Valladolid (Fig.12), al italiano Beneditto Rabuyate (1527?-1592).
Fig.7. Cristo con la cruz a cuestas.
Luis de Morales.
h.1565.
Colegiata de Osuna (Sevilla).
Fig.8. Cristo con la cruz a cuestas.
Luis de Morales.
1560-1565.
Museo Nacional de Arte de Cataluña (Barcelona).
Número de inventario: 011549-000.
Fig.9. Cristo con la cruz a cuestas.
Seguidor de Luis de Morales.
S. XVI.
Convento de San Pedro de las MM. Justinianas (Cuenca).
Fig.10. Cristo con la cruz a cuestas.
Seguidor de Luis de Morales.
S. XVI.
Colección Grases (Barcelona).
Fig.11. Cristo con la cruz a cuestas.
Seguidor de Luis de Morales.
S. XVI.
Convento de Dominicas (Plasencia).
Fig.12. Cristo con la cruz a cuestas.
Atribuido a Benditto Rabuyate.
h. 1560.
Real Iglesia de San Miguel y San Julián (Valladolid).
16. BIBLIOGRAFÍA
- CORTÉS, F. et al. Luis de Morales, exp., Badajoz: Diputación de Badajoz, 2018.
- LÁZARO, J. Exposición de obras del Divino Morales, cat. exp., Madrid: Casa Lacoste, 1917.
- RUIZ, L. El Divino Morales, cat. exp. Madrid: Museo Nacional del Prado, 2016.
- TERRÓN, M.T.; BAZÁN, M. Obras de arte inéditas en conventos de Plasencia en Norba, revista de arte, nº 12, 1992, pp.133-146.
- VV. AA. Callada belleza: arte en las clausuras de Cuenca, cat. exp., Cuenca: Catedral de Cuenca, 2008.
17. TASACIÓN
En el mercado actual (2015-2020) de obras pictóricas de la escuela española del s. XVI que siguen los modelos de Luis de Morales de Cristo con la cruz a cuestas, podemos encontrar remates entorno a los 750 – 850 €.
Es evidente que las cuatro obras comparten una serie de parámetros comunes como la temática, la cronología, la técnica, la autoría anónima o el formato devocional. También cabe destacar que las obras de Luis de Morales, aun siendo un artista reconocido internacionalmente, actualmente no tienen una gran demanda, debido a que la temática de las mismas distan mucho de las tendencias actuales del mercado y esto, como es evidente, repercute directamente en sus seguidores que imitan su estilo. Este fenómeno se aprecia en la salida al mercado del Cristo con la cruz a cuestas que se subastó en Ansorena el 6 de marzo de 2018 (Fig.15), con un precio de salida de 1.200 € y finalmente no se remató. Esta misma obra se subastó en Setdart Barcelona el 30 de abril de 2018 (Fig.16), apenas un mes después y aparentemente restaurada, y se remató por 850 €, un precio bastante inferior al de salida en Ansorena.
La calidad de la obra estudiada, así como su estado de conservación van a ser los parámetros decisivos a la hora de cuantificar el valor económico de la obra respecto a los referentes seleccionados. Aparentemente goza de un buen estado de conservación y es evidente que presenta una calidad superior a las obras tomadas como referentes, pues además de estar más próxima a los modelos de Morales se aprecia una mayor maestría a la hora de representar el rostro, la posición de las manos y los pliegues de la túnica.
Por lo tanto atendiendo a estos referentes y a lo expuesto con anterioridad valoraría la pieza en 1.700-2.000 €.
Fig.13. Cristo con la cruz a cuestas.
Escuela española s. XVI.
Óleo sobre tabla.
43,6 x 32 cm.
Precio de salida: n/a.
Remate: 750 €.
Balclis, 15 diciembre de 2015.
LOTE 1325.
Fig.14. Cristo con la cruz a cuestas.
Escuela española ff. del s. XVI.
Óleo sobre tabla.
38,5 x 27 cm.
Precio de salida: 1.000 €.
Remate: no se remató.
Alcalá Subastas, 9 marzo 2016.
LOTE 749A.
Fig.15. Cristo con la cruz a cuestas.
Escuela española s. XVI.
Óleo sobre lienzo.
101 x 88 cm.
Precio de salida: 1.200 €.
Remate: no se remató.
Ansorena, 6 marzo 2018.
LOTE 212.
Fig.16. Cristo con la cruz a cuestas.
Escuela española s. XVI.
Óleo sobre lienzo.
102 x 89 cm.
Precio de salida: n/a.
Remate: 850 €.
Setdart Barcelona, 30 abril 2018.
LOTE n/a.